Ganar Tiempo

Por: Andrés Ceballos

Los especialistas en las áreas de negocios y Marketing hablamos e investigamos mucho  sobre los cambios. Las tecnologías que cambian, las personas que cambian, la estrategia que cambia, las empresas que cambian, los gobiernos que cambian. Ante semejante escenario de cambios hay algunos que les cuesta adaptarse y pierden, otros se anticipan para ganar a pesar del riesgo de lo incierto, otros readaptan sus modelos; en todo esto aparecen las innovaciones en diferentes áreas, la estrategia es una de ellas, pensar en adaptar la estrategia a estos tiempos es un enorme desafío y sobre todo una difícil decisión. No vivimos en una época de cambios, vivimos un cambio de época. Pensar en nuevos objetivos no es una tarea fácil y, sobre todo para aquellas empresas que consideran los cambios realizados en los `90 como cambios recientes

Alguien me preguntaba, ¿Por qué debemos cambiar?, porque cambiar es parte del negocio, cambiar no es una decisión ni una necesidad, cambiar es una condición de estos tiempos, seguir haciendo lo que se hacía y crecer, es anti natural. Ahora, no confundamos cambiar con “volver a ser”,  esta es una decisión tan importante como la de cambiar pero con una diferencia, “volver a ser” es para aquellos que alguna vez hicieron algo que los llevo a poder ser parte de la civilización, se adhirieron a partir de una construcción mística conformándose en un emblema, es decir ser parte del corazón de las personas.  En este “volver a ser”, surgen conceptos que llegaron con los cambios y quedan instalados como auditores de las decisiones, son rectores que permiten pensar y contribuyen a cambiar o volver a ser, uno de ellos es el “propósito”, esta definición (que a mi entender aún está en formación), permite que nos preguntemos, a grandes rasgos, ¿para que nacimos como empresa?, ¿Cómo llegamos hasta aquí?, estas preguntas son las que permiten entender las decisiones tomadas a los largo del tiempo, nos contribuyen a pensar en el concepto de la visión, como verán “volver a ser” no es tan simple, como tampoco lo es cambiar.

En estos tiempos, los cuales la estrategia pasa por adaptar la estructura a la tecnología, la cual a su vez, lo planificado se convierte en incontrolable, ya que está en manos de los consumidores, el estudio de lo impredecible es fundamental para la comprensión de los acontecimientos y la prospección de los futuros hechos, ante estas nuevas formas y maneras que nos propone el futuro que ya llego, los managers se han tenido que sofisticar, ser un gobernante o una persona dedicada a los negocios implica saber también de ciencia, técnica y tecnología.

El Marketing se adhiere a estas nuevas formas, las marcas dominantes han decidido cambiar. Un informe muestra que Coca – Cola, Starbucks, Pepsi, Danone, Unilever, Nestle, Nike entre muchas otras han decidido incursionar en nuevos productos, nuevos modelos de negocios, nuevos mercados, han modificado sustancialmente sus visiones, las marcas entienden que pensar en categorías es ponerse un corset, seguramente, el valor del “volver a ser”, algunas de estas marcas deberán tomar para no perder mientras readapta su estrategia, la generaciones “clásicas” estaremos más expuestos a estos cambios, ya estamos encontrando alimentos con marcas de indumentaria, sin ir muy lejos, Arcor este año ingresó de la mano de Bagó al mercado medicinal lanzando un producto nutricional.  

¿Cómo llegamos hasta aquí?

Vivimos en la idea de que el tiempo y el espacio eran dos puntos iguales, es decir pensar en una acción requería definir un punto en el tiempo y otro en el espacio, es decir un momento, hoy bajo esta realidad de la vida virtual, los relojes no funcionan igual y las distancias se distorsionan conformando el instante, el cual es un momento de intervalo tan corto que se hace imperceptible, esto fue afirmado por el Físico Matemático Lorentz, el cual postuló en el mundo científico, “Las transformaciones de Lorentz”, una teoría compleja que luego Minkowski, otro científico, interpretó y redefinió diciendo algo que en nuestros tiempos es real; el tiempo y el espacio no son entidades autónomas, es decir, son parte de un todo. Ahora bien, lo que estos científicos determinaron es que las personas están separadas por espacio y tiempo como una unión de los mismos, lo que no tuvieron en cuenta es que estos se unieron de una manera única y la razón es la tecnología de las comunicaciones, google llamó a esta unión el "micromomento".

Ante este mundo de decisiones sofisticadas, un mundo diferente, un mundo sin tiempos, donde si no está estudiado y medida cada decisión sería como pisar una baldosa floja luego de la lluvia; la principal variable de análisis es el comportamiento de las personas, buscar entender los motivacionales, las emociones, desde la vida virtual. Esta mirada nos permite estar más cerca de las ellas, el tiempo ha cobrado el verdadero valor de importancia dada su escasez, es por esto que antes de tomar decisiones, en cada plan y en cada acción debemos meditar sobre el tiempo de nuestras organizaciones o empresas y en el tiempo de las personas, en ¿porque nos lo darían?, la idea de que la rentabilidad es solo un medio se hace cierta, el objetivo no es ganar dinero, si no ganar tiempo.